


Comprender la descoagulación: la importancia de las sustancias dispersas
No coagulado se refiere a un estado en el que una sustancia, normalmente una proteína o una célula, carece de la capacidad de formar agregados o grumos. En otras palabras, permanece en un estado disperso o disuelto, en lugar de formar una masa sólida. Por ejemplo, cuando las plaquetas sanguíneas no están coaguladas, pueden moverse libremente en el torrente sanguíneo y no forman coágulos. De manera similar, cuando las células cancerosas no están coaguladas, es más probable que puedan diseminarse y migrar a otras partes del cuerpo. Por el contrario, las sustancias coaguladas son aquellas que han formado agregados o grumos, como coágulos sanguíneos o agregados de proteínas asociados con ciertas enfermedades como el Alzheimer o el Parkinson.



