


Comprensión de la enterostasis: causas, diagnóstico y opciones de tratamiento
La enterostasis se refiere a un estado de alteración de la motilidad intestinal y/u obstrucción intestinal, que puede provocar una variedad de síntomas que incluyen dolor abdominal, náuseas, vómitos y estreñimiento. A menudo se asocia con afecciones como el síndrome del intestino irritable (SII), la gastroparesia y el crecimiento excesivo de bacterias en el intestino delgado (SIBO).
La enterostasis puede ser causada por una variedad de factores, que incluyen:
1. Trastornos neurológicos: afecciones como la enfermedad de Parkinson, la esclerosis múltiple y las lesiones de la médula espinal pueden dañar los nervios que controlan la motilidad intestinal y provocar enterostasis.
2. Cirugía gastrointestinal: procedimientos como la gastrectomía o la resección intestinal pueden alterar la anatomía y función normales del intestino, provocando enterostasis.
3. Condiciones inflamatorias: afecciones como la enfermedad de Crohn, la colitis ulcerosa y la diverticulitis pueden causar inflamación en el intestino, lo que provoca problemas de motilidad y enterostasis.
4. Infecciones: Las infecciones bacterianas o virales pueden dañar el intestino y alterar la motilidad normal, provocando enterostasis.
5. Medicamentos: ciertos medicamentos, como los anticolinérgicos y los opioides, pueden ralentizar la motilidad intestinal y provocar enterostasis. La enterostasis se puede diagnosticar mediante una variedad de pruebas, que incluyen: 1. Estudios de motilidad gastrointestinal: estas pruebas miden el movimiento de los alimentos y líquidos a través del sistema digestivo mediante sensores o técnicas de imagen.
2. Manometría: esta prueba mide la presión y el movimiento de los músculos del tracto digestivo.
3. Endoscopia: esta prueba utiliza un tubo flexible con una cámara y una luz en el extremo para visualizar el interior del tracto digestivo.
4. Estudios radiológicos: se pueden utilizar radiografías, tomografías computarizadas o resonancias magnéticas para visualizar el sistema digestivo e identificar cualquier anomalía. El tratamiento de la enterostasis depende de la causa subyacente y puede incluir: 1. Cambios en la dieta: evitar los alimentos desencadenantes, comer porciones más pequeñas y aumentar la ingesta de fibra puede ayudar a controlar los síntomas.
2. Medicamentos: se pueden recetar laxantes, antiespasmódicos y antidepresivos para controlar los síntomas.
3. Procinéticos: estos medicamentos aumentan la motilidad intestinal y pueden ayudar a mejorar los síntomas.
4. Cirugía: en algunos casos, puede ser necesaria una cirugía para tratar la causa subyacente de la enterostasis, como eliminar una obstrucción o reparar el tejido dañado.5. Enterostomía: este es un procedimiento en el que se realiza una pequeña abertura en la pared abdominal para permitir el paso de las heces a una bolsa. Es importante tener en cuenta que la enterostasis puede provocar complicaciones como estreñimiento, diarrea y desnutrición, por lo que es importante. buscar atención médica si los síntomas persisten o empeoran con el tiempo.



