


¿Qué son las gibosidades? Tipos, causas y opciones de tratamiento
Las gibosidades son proyecciones pequeñas, redondeadas o con forma de protuberancias que se pueden encontrar en varias partes del cuerpo, como la piel, los músculos o los huesos. Pueden ser benignos o malignos y su apariencia puede variar según su ubicación y la causa subyacente. Algunos tipos comunes de gibosidades incluyen: 1. Queratosis seborreica: son crecimientos benignos que aparecen como parches ásperos y escamosos en la piel. Suelen ser de color tostado, marrón o negro y se pueden encontrar en la cara, el torso o las extremidades.
2. Lipomas: son tumores grasos benignos que suelen ser suaves al tacto y móviles debajo de la piel. Pueden ocurrir en cualquier parte del cuerpo, pero son más comunes en el cuello, los hombros y los muslos.
3. Osteocondromas: son crecimientos óseos benignos que pueden ocurrir en cualquier hueso del cuerpo. Suelen ser pequeños y redondos y pueden encontrarse cerca de las articulaciones o en la superficie del hueso.
4. Ganglios: son bultos no cancerosos que se forman en los tendones o las articulaciones, generalmente como resultado de una inflamación o lesión. Pueden ser dolorosos y limitar la movilidad.
5. Tumores de células gigantes: son tumores benignos que se presentan en los tejidos blandos, como los músculos o la grasa. Pueden crecer y causar dolor o movilidad limitada. Las gibosidades pueden ser causadas por una variedad de factores, que incluyen genética, lesión, infección o inflamación. En algunos casos, pueden ser un signo de una afección médica subyacente, como cáncer o un trastorno del tejido conectivo. Es importante que un profesional de la salud evalúe cualquier gibosidad nueva o persistente para determinar su causa y el tratamiento adecuado.



