


Entendiendo a los Daevas en el zoroastrismo: las fuerzas de la oscuridad y el mal
Daeva es un término utilizado en el zoroastrismo, una antigua religión de Persia (el actual Irán). Se refiere a una clase de seres que se consideran espíritus malignos o malévolos. En la creencia zoroástrica, se cree que los daevas son los sirvientes del dios maligno Angra Mainyu, quien se opone al dios bueno Ahura Mazda. A menudo se representa a los Daevas con poderes sobrenaturales y capaces de causar daño a los humanos. Se cree que son responsables de muchos acontecimientos y fenómenos negativos en el mundo, como enfermedades, desastres naturales y desgracias. En algunos textos zoroástricos, se describe que los daevas tienen la capacidad de adoptar diversas formas, incluida la de animales o seres humanos, para engañar y manipular a otros. A diferencia de los daevas, se considera que Ahura Mazda es la encarnación de la bondad y verdad, y se cree que es el creador del mundo y de todo lo bueno que hay en él. Los zoroastrianos creen que siguiendo las enseñanzas de Ahura Mazda y rechazando la influencia de los daevas, pueden vivir una vida virtuosa y plena. Vale la pena señalar que el concepto de daeva ha evolucionado con el tiempo, y diferentes ramas del zoroastrismo han desarrollado sus propias interpretaciones de qué son estos seres y qué papel desempeñan en el ámbito espiritual. Sin embargo, en esencia, la idea de daeva representa las fuerzas de la oscuridad y el mal que deben ser resistidas y superadas para lograr la iluminación espiritual y la salvación.



