


Micropipetas: dosificación y medición precisas de pequeños volúmenes
Una micropipeta es un tipo de pipeta que tiene un volumen muy pequeño, típicamente en el rango de nanolitros (nL) a picolitros (pL). Se utiliza en diversas aplicaciones científicas como biología molecular, química y farmacología. Las micropipetas están diseñadas para dispensar y medir con precisión volúmenes muy pequeños de líquidos, incluidos reactivos, tampones y muestras. Las micropipetas están disponibles en diferentes tamaños, siendo los más comunes de 10 a 100 nL y de 100 a 1000 pL. Por lo general, están hechos de vidrio o plástico y tienen una punta estrecha diseñada para minimizar la cantidad de líquido que se dispensa. Las micropipetas se utilizan a menudo junto con otros equipos de laboratorio, como microscopios, espectrofotómetros y máquinas de PCR. Algunas aplicaciones comunes de las micropipetas incluyen: 1. Medición de la concentración de fármacos u otros compuestos en muestras biológicas.
2. Dispensar cantidades precisas de reactivos para reacciones o ensayos químicos.
3. Transferir pequeños volúmenes de líquidos entre diferentes contenedores.
4. Recoger y analizar muestras muy pequeñas, como las obtenidas de microorganismos o células.
5. Dispensación precisa de muestras líquidas para análisis de espectroscopia o cromatografía. Las micropipetas son una herramienta esencial en muchos campos científicos, ya que permiten a los investigadores trabajar con volúmenes muy pequeños de líquidos y medir y dispensar estos volúmenes con precisión.



