


El poder de la cortesía: cómo los pequeños actos pueden marcar una gran diferencia
La cortesía es una forma educada y respetuosa de comportarse hacia los demás. Implica mostrar buenos modales, ser considerado con los sentimientos y necesidades de otras personas y estar dispuesto a ayudarlas y apoyarlas cuando sea necesario. La cortesía se puede mostrar de muchas maneras diferentes, como decir "por favor" y "gracias", abrir las puertas a los demás y escuchar lo que tienen que decir. A continuación se muestran algunos ejemplos de comportamiento cortés: 1. Decir "disculpe" o "perdón" cuando necesita pasar a alguien o interrumpirlo.
2. Mantener las puertas abiertas para los demás y dejarles pasar primero.
3. Ofreciendo ayuda con bolsas pesadas u otras cargas.
4. Escuchar atentamente lo que los demás tienen que decir y responder pensativamente.
5. Usar buenos modales, como decir "por favor" y "gracias", y dirigirse a las personas por sus títulos adecuados (por ejemplo, "Señor" o "Señora")
6. Ser respetuoso con el espacio personal y las pertenencias de los demás.
7. Disculparse cuando haya causado molestias o daños.
8. Mostrar aprecio por la ayuda y el apoyo de los demás.
9. Ser paciente y comprensivo, especialmente cuando se trata de situaciones o personas difíciles.
10. Sonreír y hacer contacto visual para demostrar que eres accesible e interesado en los demás. Al mostrar cortesía hacia los demás, podemos construir relaciones más sólidas, crear un ambiente más positivo y respetuoso y hacer del mundo un lugar mejor para todos.



