


La trágica historia de Baldur: la caída de la gracia y la resurrección de Dios
Baldur es un dios de la mitología nórdica, conocido por su belleza y bondad. Es hijo de Odín y Frigg, y a menudo se le representa como un joven apuesto de cabello rubio y ojos azules. Según la leyenda, Baldur era amado por todos los que lo veían, y era conocido por su sabiduría y compasión... Sin embargo, Baldur tenía una debilidad: era vulnerable al muérdago. Un día, la diosa Freyja lo engañó para que se parara en un campo de muérdago y lo mató una flecha hecha con la planta. Su muerte causó gran dolor entre los dioses y diosas, y no pudieron devolverlo a la vida... En algunas versiones del mito, Baldur resucita y regresa al mundo de los vivos. En otras versiones, permanece en el inframundo, gobernando a los muertos con su esposa, Nanna. Independientemente de los detalles de la historia, la muerte y resurrección de Baldur se ven como un símbolo del ciclo de la vida y la muerte, y el poder del amor y la compasión para superar incluso los desafíos más grandes.



