


Comprender los aditivos: qué son y cómo funcionan
Aditivo se refiere a algo que se puede agregar o combinar con otras cosas sin cambiar su naturaleza o propiedades básicas. En otras palabras, un aditivo no altera la sustancia o componente subyacente, sino que le agrega algo nuevo. Por ejemplo, el azúcar es un aditivo para hornear porque se puede agregar a la harina y otros ingredientes sin cambiar sus características fundamentales. De manera similar, un colorante es un aditivo en la pintura porque se puede mezclar con otros pigmentos y solventes sin afectar sus propiedades básicas. Por el contrario, una sustancia que no se puede agregar a otra sustancia sin cambiar sus propiedades se llama reactiva o sintética. Por ejemplo, una sustancia química que reacciona con otras sustancias para formar un nuevo compuesto es reactiva, mientras que una sustancia que se combina con otros ingredientes para formar un nuevo producto es sintética. Los aditivos se usan comúnmente en una amplia gama de productos, incluidos los alimentos. , cosméticos, productos farmacéuticos y materiales de construcción. Pueden servir para diversos propósitos, como mejorar el sabor, la textura o la apariencia de un producto, mejorar su rendimiento o vida útil o proporcionar beneficios adicionales para la salud.



